Desde la primera aparición de Sonic, la saga ha seguido un camino marcado por sus propias ideas, donde destacan por encima de todo un estupendo diseño de niveles y una velocidad endiablada, pese a que esporádicamente hizo sus incursiones en otros géneros como las aventuras o los juegos de carreras. En este último título de Sonic, se pretende coger lo mejor de tan dilatada carrera y crear un nuevo referente dentro del género de los plataformas de velocidad. Veamos si el Sonic Team ha logrado conseguirlo.



La historia de los juegos de Sonic podría resumirse en su lucha contra el Dr. Eggman (o Dr. Robotnik), teniendo un claro paralelismo con su antiguo rival Mario, que debía hacer lo mismo con Bowser. En este caso no podía ser distinto y tenemos al Dr. Eggman dispuesto a sembrar el terror, sin embargo ahí estaremos nosotros para impedírselo. Cabe señalar que sí habrá una ligera diferencia con la historia clásica, pues en Sonic Rush habrá una supuesta dimensión paralela donde también estará Eggman haciendo de las suyas. Será en esa dimensión donde podremos manejar al nuevo personaje de la factoría Sonic, Blaze. De este modo podremos jugar cada pantalla con el personaje que queramos, pudiendo vivir la aventura desde ambos lados, aunque realmente los niveles y la jugabilidad será prácticamente idéntica. Pero Sonic no es una franquicia de historias brillantes, así que pasemos a analizar lo que realmente importa en este título, la jugabilidad.


En primer lugar, y dado que es un juego de Nintendo DS, es importante comentar qué uso hace el juego de las posibilidades de la portátil de Nintendo. El empleo de la pantalla táctil se deja a un lado en este caso (aunque se use esporádicamente en las pantallas especiales), al igual que el micrófono, teniendo la cruceta y los botones como nuestros únicos medios para manejar al erizo, como siempre ha sido. Las dos pantallas de la consola han sido combinadas, de modo que tendremos un escenario con bastante amplitud vertical, y pasaremos el rato mirando para ambas pantallas, pues Sonic ira variando su recorriendo entre ellas, como si de una sola pantalla se tratase. Es algo que ya hemos visto en otros juegos como Bomberman DS, pero que no quita mérito al gran trabajo realizado en este aspecto. El control es muy intuitivo, usando la cruceta para los movimientos y los botones (a,b,x,y) para saltos e impulsos. Del mismo modo podremos usar los gatillos de nuestra DS para distintos movimientos (como por ejemplo un impulso vertical para poder llegar más alto).


Entrando de lleno en el juego la palabra que mejor lo define sería frenético. Nos encontramos con un juego de plataformas con una velocidad endiablada, donde nuestros reflejos serán sin lugar a duda nuestro gran aliado. El juego alcanza una velocidad en la cual no hay ojo humano que sea capaz de percibir un enemigo y hacer la acción correcta para esquivarlo satisfactoriamente, por lo que se ha implementado una especie de "impulso" de energía que nos permite aumentar un poco nuestra velocidad un segundo a la vez que nos sirve para destruir cualquier enemigo que se nos cruce por el camino. De este modo no será necesario pararse para esquivarlo, y el ritmo de juego será constante a la vez que tendremos que tener los ojos bien abiertos para no chocar con algún enemigo. Cabe señalar que estos impulsos estarán limitados por una barra de energía que podrá ser aumentada con nuestras peripecias y buenas artes durante el recorrido de cada pantalla. Por lo tanto, nos encontramos con unos niveles donde lo fundamental es completarlos rápido, conseguir una cantidad cuanto mas alta mejor de anillos, y por supuesto no olvidarnos de las famosas esmeraldas del caos.